Videojuegos = cultura

Como habéis podido leer desde este mismo 25 de mayo el videojuego será considerado un producto cultural por la aprobación de la Comisión de Cultura del Gobierno de España.

Esto se a conseguido sobre todo gracias a la acción llevada a cabo por la unión de las empresas mas importantes autóctonas del sector, con figuras tan carismáticas como la del mismo ‘Gonzo’ Suárez (ideólogo jefe del videojuego Comandos). Esta alianza se a formado bajo el nombre de DEV, Asociación Española de Empresas Productoras y Desarrolladoras de Videojuegos y Software de Entretenimiento.

Lo que se ha conseguido a efectos prácticos es quitar muchos de los prejuicios maliciosos que intentan dinamitar un mercado que mueve mas capital que los discos y películas juntos. Ya la gente tendrá menos argumentos a los que atenerse para imprecar sobre los videojuegos tachándolos de algo degenerativo para la moral misma del ser humano.

Dejando a un lado las opiniones sociales la consideración por parte del Estado español de los videojuegos como cultura también es un reconocimiento a todo el trabajo que se esconde detrás de los mismos. Diseñadores, músicos, dibujantes, programadores… También un punto a recalcar es la ‘obligación’ de preservar nuestra cultura por lo que las desarrolladoras contaran con subvenciones por parte del estado, algo que indudablemente no puede hacer que se creen nuevas desarrolladoras basadas únicamente en los ingresos de las subvenciones.

Todo esto también repercute en la conocida fuga de talentos del sector a desarrolladoras extrajeras. Esto, como es obvio, no se puede saber a ciencia cierta pero se prevee que ayudara a que los desarrolladores españoles tengan mas oportunidades dentro de nuestras fronteras. Y bueno no solo españoles, las empresas extrajeras podrían encontrar un atractivo reclamo en esta nueva consideración del videojuego para instalar ,aquí en nuestro país, nuevos estudios.

Para terminar dejar claro que tan solo a sido un pequeño paso para la industria de, posiblemente para todos, nuestra fuente de ocio favorita.