La seguridad es uno de los puntos más importantes en estos tiempos que corren. Con los procesadores actuales somos capaces de descifrar contraseñas en cuestión de horas (o minutos) y con Internet nadie está seguro de ser robado (datos bancarios, emails o la cuenta de twitter). Todas las claves hoy en día están basadas en dígitos, ya sean alfanuméricos como con caracteres especiales (una práctica muy recomendable) pero a unos investigadores de AT&T se les ha ocurrido un nuevo método, que aunque no revolucionará puede ser bastante útil y cómodo: Usar los mapas como identificación.
Muchos de nosotros memorizamos mejor imágenes que fechas importantes, rostros o lugares a una frase reseñable, es por esto que este nuevo paso, además de ser más seguro puede ser más sencillo. Y eso teniendo en cuenta que se suele usar una frase, o fecha conocida en la contraseña, pero si se desea ser más cauto seguramente se utilizarán una ristra de números y letras pensadas aleatoriamente agravando el coste de recordarlo.
Este nuevo método se basaría en un mapa, al estilo Google Maps, donde el usuario en vez de escribir la clave tendría que clickear su lugar secreto. De ahí se obtendría la latitud y longitud (con 10 dígitos en cada caso, siendo por tanto como una contraseña formada por 20 números) y se enviaría como el número de seguridad. Como es evidente recordar 20 números puede ser mortal, pero recordar la casa donde se pasaba uno los veranos de joven en medio del bosque o un solar en medio del Himalaya no sería nada complicado (de hecho más fácil). Evidentemente en este nuevo formato también habría que ser precavido y no marcar donde se vive, el lugar de trabajo o algún lugar demasiado «sencillo» para descifrar, no obstante de base ya es mucho más seguro y fácil.
Por otro lado, hablando desde una perspectiva más técnica, los virus y troyanos diseñados para obtener las contraseñas no funcionarían correctamente, ya que no se teclearía nada y calcular el movimiento del ratón sería ilógico (además de que simplemente el mapa puede empezar cada vez en un punto distinto del globo, por lo que sin punto de partida no hay referencia). En otras palabras, una sencilla solución que tiene todas las papeletas para ser un nuevo sistema de contraseñas online.
Leído en La Información