Hoy es un día perfecto, tanto como cualquier otro, para hacer una reflexión. Llevo unas semanas sin pisar demasiado por Internet y ya era hora de hablaros en Govoid sobre algo que tengo en mente. No voy a perder el tiempo hablando de propósitos para el Año Nuevo, sino que voy a cometer lo que es un despropósito para muchos: voy a criticar el uso de las redes sociales.
Bien, en primer lugar, quiero explicar que mi punto de vista con respecto a lo que está dentro y fuera de Internet es todo lo neutral que puedo permitirme ser. Uso constantemente Twitter, Facebook, Tuenti, leo blogs, páginas de periódicos, me informo sobre los cables de Wikileaks y aprendo (cuando de verdad enseñan algo) de los gurús de la economía. Por otro lado, debo reconocer que mi paso por el mundo de la informática ni siquiera se acerca a una facultad o escuela de informática más que por los amigos que tengo allí. Pero escribo en este blog de tecnología y gracias a ello he aprendido bastante, estando rodeado de informáticos. Además, mi preparación ha virado de la economía a las lenguas, y siempre he vivido en el mundo de la literatura. Viajo con relativa frecuencia, conozco a gente de profesiones muy distintas, de diferentes partes del globo y con su carrera más o menos asentada. Es decir, me siento en la posición idónea para opinar del asunto.
Ahora, ¿Dónde quiero llegar con esto? Pues bien, resulta que llevo unas semanas en las que no siento el mismo aprecio por todo este mundillo de las redes sociales. Me niego a dar el discurso de “si queréis vivir, salid a la calle.” Asumo que todos somos conscientes de este hecho y, seguidamente, me disculpo por estar usando esta falacia. Lo que quiero decir es que me resulta agotador intentar discernir quienes me están enseñando algo útil y quienes no. La comunicación, es fundamental e imprescindible. Es un derecho y disfrutamos de él. Pero es un castigo cuando me intentan vender la moto de que si no estás en la red, estás out, eres un excluido y no sabes qué se cuece por el mundo.
Por favor, usuarios insomnes de las redes sociales, ¿De verdad pensáis que pasar el día conectados va a daros la respuesta que los que no se conectan no conocerán? En absoluto. No es incompatible el uso de las redes con la vida fuera de ellas. Una combinación de ambos es lo ideal. Por eso, ¿Por qué no buscarle una utilidad real al uso de las redes sociales? Si se pasa de ese estado de pasividad a un estado de actividad podremos ver materializados unas pretensiones de mejora y evolución en nuestros hobbies y proyectos profesionales. Principalmente, si hacemos de estos últimos una forma de disfrute, el beneficio personal que obtendremos será infinitamente mayor que si no hubiéramos tomado la decisión de activarnos. Las redes sociales deben ser siempre útiles, no siempre un pasatiempo. Divulga tus conocimientos, muestra el avance que llevas hecho como artista, comenta planes de futuro para tu empresa. Permite que las redes sociales sean una fuente de crítica porque, indudablemente, esto te ayudará a perfeccionar todo lo que hagas.
Insisto, sacar un provecho real incluso de nuestro tiempo libre es lo que nos ayudará a desarrollarnos como personas y, al fin y al cabo, eso nos lleva a conocernos a nosotros mismos para poder elegir con seguridad cuáles son los zapatos (zapatillas, chanclas o sandalias) en los que querremos caminar a lo largo de nuestra vida. Trabajad en vuestro hobbie y haced de ello vuestra profesión. Convertid vuestros proyectos en ejemplo de autodesarrollo. Conseguid la utilidad del tiempo.
¡Fastántica aportación!
Respecto a éste tema, yo en particular pienso que tanto multitasking y tanta vida virtual (tan frenética), si bien puede darnos la ilusión de estar más informados y más de buenas con todo el mundo, deteriora ciertas capacidades (eso sí, a favor de otras, que podría argumentarse que van a ser mucho más útiles en el futuro) , como la de concentrarse en una tarea en particular y en uno mismo.
El miedo al aislamiento es absurdo cuando muchas de las mejores cosas que hacemos y pensamos surgen, precisamente, de nuestro tiempo aislados.
No hablo de marginarse, claro, simplemente, meterse dentro de la cabeza de uno mismo sin tener el culo inquieto y las miles de voces silenciosas de otros cientos de personas que probablemente no estén pensando en algo coherente con lo que intentas crear, si acaso alguna vez te das el tiempo suficiente como para saber que tu cabeza está trabajando en algo.
Bosquejada un poco mi opinión, también te digo que el trabajo de muchos depende del ocio de otros, así que para ellos esa utilidad de la que hablas que podríamos darle al medio es precisamente lo que están haciendo, y a ellos, como individuos, al menos a corto plazo, les conviene que las cosas estén yendo en ésta dirección.
En cualquier caso, es un tema complicado, una nueva aproximación a la comunicación entre individuos y grupos, que no queda más remedio que ir definiendo y negociando límites entre todos poco a poco esperando que cuando la consigamos incorporar completamente a la vida de todos esté lo más equilibrada posible y redunde en un bien común.
Me alegra que hayas hablado de ello, y espero con ganas ver lo que algunos usuarios tienen que aportar al tema, así como algunos de nuestros propios compañeros, que están siempre atentos a su smartphone de pulsera.
Es cierto que ciertas personas desarrollan parte de su ocio en redes sociales, quedo hablando por el tuenti, la gente sabe donde estado y las cosas que hago por las fotos del tuenti( digo tuenti como digo facebook), comparto las pequeñas cosas que me pasan día a día por twitter…
Y la gente que no estamos tanto en la onda, yo que entro en twitter de pascuas a ramos solo cuando me quiero ahorrar un sms, pues a veces no nos enteramos de cosas, bueno pues no pasa nada sigo vivo xD.
Parece que la vida social tambíen ha sido digitalizada, y ha sido así desde que existió el teléfono móvil… Es la sociedad, no se puede parar y lo peor de todo esque no se sabe el futuro de esto :S